Las ganas.

-Vete al infierno
-Si...pero tú te vienes conmigo.

Qué bonito sería ir al infierno, o al cielo, aunque sean inventos bíblicos y esas polladas. A veces me pregunto qué pasa después de la muerte, aunque luego comprendo que para saberlo, la única solución es morirse, así que siempre lo descarto.
Lo descarto porque debe ser aburrido morirse, quedarse parado sin hacer nada, dejar de pensar, con lo que me entretengo yo pensando...
Cierto es que también, en ciertos momentos, es aburrido vivir, sobretodo cuando la monotonía se hace eterna y nada cambia, pero entonces es cuando pienso que la muerte tiene que ser mucho más jodidamente aburrida, así que no sé por qué tanto morir morir morir morir...
Sonará cursi, sonará imbécil, pero la vida es un regalo, ha de aprovecharse, aunque suenen idiotas estas palabras, que me suenan hasta a mí, pero es cierto.
"Porque vivir es jugar, y yo quiero seguir jugando", ya lo decía Calamaro.
De hecho, tengo miedo a la muerte, es normal, lo que no creo que sea normal es estar deseándola a cada momento.
Quién sabe lo que puede pasar mañana, que nos puede hacer felices, quién sabe qué sonrisa podemos lucir al mundo dentro de quién sabe cuántas horas.
Soy muy ñoña y muy cursi, lo sé, pero prefiero ser cursi antes que pensar a cada momento que no sirve de nada vivir.
PD. la foto es una paranoia que me encontré por el google, es de un anuncio o qué se yo, no importa.

El lado sucio de la almohada.

Como todas las cosas que tenemos, la almohada no iba a ser menos, y sí, escépticos, se ensucia, huele mal y termina por ser hasta molesta, como la vida misma. Respiramos, sudamos, babeamos mientras soñamos con las tetas de Virginia... Todo eso va convirtiendo nuestra almohada poco a poco y sin que nos demos cuenta, en un monstruo, un monstruo de tonos grises que va creciendo sin que nos demos cuenta hasta que un día, normalmente de verano, buscando el irresistible, seductor y orgásmico (para algunos) lado frío de la almohada, le damos la vuelta y ahí la dejamos criando vete tu a saber qué, puede que hasta monguis o incluso gremlins, pero de los malos. Somos humanos y no damos cuenta de que este lado se pone sucio como el anterior y volvemos a decidir sabiamente darle la vuelta, es entonces cuando sin darnos cuenta apoyamos la cabeza en el lado SUCIO de la almohada, y sucio con mayúsculas, joder, que yo me he llegado a encontrar un ejemplar del Quijote de 1926. A mí por lo menos, lo único que se me ocurre es tirar la almohada al rincón de la habitación y esperar que se limpie sola, siempre ocurre y se vuelve a colocar como por arte de magia en su sitio, ¿cómo lo hará?

Sin más dilación y sin ningún motivo, aprovecho para comparar la vida con el lado sucio de la almohada, sin que te des cuenta, se va haciendo cada vez más asquerosa, pero hasta que te hartas y la lanzas al otro extremo de la habitación y ella solita se arregla (o son los padres). Bueno, da igual, la cosa es que lo único que se me ocurre que puede ser como tirar la almohada, es la muerte, así que la única opción que te da un Prostiputo para que soluciones tu mierda de vida es que te suicides... o que te acostumbres a la mierda.

True Story.

Maten a las ballenas y dejen paso a las tías buenas.

En realidad el título ya lo dice todo, maten a las ballenas y dejen paso a las tías buenas, eso sí, preferiblemente que sean morenas.

Con todo esto que digo puede parecer que quiera desterrar a Virginia de este nuestro penoso mundo, pues algunos, como Álvaro, que a veces la llama de gorda (de los creadores de llamar de usted, llega: llamar de gorda..ya me entienden...) pueden catalogarla como ballena (cosa que yo no haría porque simplemente para mí pesa un poco, pero Virginia, no sos vos, soy yo ), y además que es rubia. Pero vamos, que eso nunca, y si fuera así, le haría un gran favor.Y basta de hablar de Virginia que parece que estoy enamorado de ella... aunque en realidad todos los Prostiputos lo estamos. Sí, yo tengo la mala suerte de ser uno de los Prostiputos, lo que vienen siendo unos seres infelices, huraños y unos machos cabríos en toda regla, aparte de las cualidades propias que tenga cada uno, pues somos como los 4 fantásticos (The Prostiputos somos 5, pero Pablo es negro y no se cuenta), cada uno tiene su poder. Yo soy un músico empedernido, más empedernido que músico, y de índole silencioso con mucho que pensar y poco que decir, pues para qué demostrar lo que sé o lo que pienso si no tengo ningún interés por hacerlo, ningún interés por que la gente sepa de mí, ningún interés por la vida en general y la culpa de todo, Además de Dios, la tiene Arthur Schopenhauer que es una mala influencia, ese sí que se hubiera cargado a unas cuantas ballenas por despecho para aliviar su pesimismo profundo ahí a cabezazos, a ver si se mataba él también. Yo lo haría, pero como bien dijo Alvarín, las mataría callando y vosotros deberiais hacer lo mismo así que CALLAD, TONTOS (lease con tono ruboroso).

Una negra.

Esto sí que es una negra guay, coño. Una mijita fea, sí, pero guay tela. Le pasa lo que a mí, fea, con gafas grandes y cantante. Le falta el bigote.

Imposible

Pero que no, que no puedo. Que es abrir el blog y que me entren ganas de mear. Así no se pué. Yo creo que es por verle la cara al tío ese de la foto. Hablando de fotos... bueno, más bien de imágenes, o de cosas de esas que se ven... me gusta un montón el cuadro este de Monet.
En realidad me encanta el impresionismo en general, pero este es la repanocha. Me imagino que los de debajo del toldo son los del Almuerzo de los remeros de Renoir. Así que la chica del vaso de agua tiene que estar por ahí. Además el brillo del sol reflejado en el agua te alegra el día. Seguro que si la chica dejara el vaso de una puta vez y se girara para ver el agua igual hasta sonreía y tó.
Hablando de agua... me sigo meando (ahora pega ",tú", pero... ¿cómo se pone eso en plural para que quede bien?). En fin, que os dejo. Próximamente, yo y mi silueta ideal (si estuviésemos en el barroco...) Mira que nacer 4 siglos más tarde...