
-Vete al infierno
-Si...pero tú te vienes conmigo.
Qué bonito sería ir al infierno, o al cielo, aunque sean inventos bíblicos y esas polladas. A veces me pregunto qué pasa después de la muerte, aunque luego comprendo que para saberlo, la única solución es morirse, así que siempre lo descarto.
Lo descarto porque debe ser aburrido morirse, quedarse parado sin hacer nada, dejar de pensar, con lo que me entretengo yo pensando...
Cierto es que también, en ciertos momentos, es aburrido vivir, sobretodo cuando la monotonía se hace eterna y nada cambia, pero entonces es cuando pienso que la muerte tiene que ser mucho más jodidamente aburrida, así que no sé por qué tanto morir morir morir morir...
Sonará cursi, sonará imbécil, pero la vida es un regalo, ha de aprovecharse, aunque suenen idiotas estas palabras, que me suenan hasta a mí, pero es cierto.
"Porque vivir es jugar, y yo quiero seguir jugando", ya lo decía Calamaro.
De hecho, tengo miedo a la muerte, es normal, lo que no creo que sea normal es estar deseándola a cada momento.
Quién sabe lo que puede pasar mañana, que nos puede hacer felices, quién sabe qué sonrisa podemos lucir al mundo dentro de quién sabe cuántas horas.
Soy muy ñoña y muy cursi, lo sé, pero prefiero ser cursi antes que pensar a cada momento que no sirve de nada vivir.
PD. la foto es una paranoia que me encontré por el google, es de un anuncio o qué se yo, no importa.